No crea nadie que escribir un blog, de forma activa, es fácil, implica primero una predisposición, un tiempo, un rechazo, una concentración.
La recompensa se produce para mí, en un buen mental, expulso cosas de mi cabeza y me hace conectar con la vida.
Este blog, es para mí, un diario, pero en vez de ser secreto, es público a todo el que lo lea y prometo ser sincero sin ánimo de tener 100.000 seguidores.
Me gano la vida como agente inmobiliario, no está escrito que me jubile siéndolo, solo trabajo en exclusiva y siendo crítico, no con todo el mundo, no me muero por una propiedad, si en ella hay un capullo, no trabajo 30 pisos, no porque no pueda, sino porque en las pequeñas dosis de la vida se respira mejor. El año pasado he contabilizado que he rechazado o dejado morir un montón de captaciones que veía de antemano un futuro problema. He llevado a cabo tan complicadas operaciones inmobilarias que ya uno se piensa aquello de la salud, la mental y la física, que luego todo siempre sale.
No me despido en este post de forma pum, solo te hago referencia de lo que por este canal irás descubriendo cuando se me caliente la boca, hoy he sido muy neutral.
Mi porque también ha de ver la luz.